Cuando nos piden realizar un preboda o postboda en la playa en los meses de primavera o verano intentamos sacarlos de las playas o calas más populares de la costa del sol, repletas de gente, para buscar lugares más vírgenes, naturales donde poder integrarse con la naturaleza sin el ruido visual que genera la multitud.
Málaga nos permite encontrar para la realización de un reportaje fotográfico en la playa sorprendentes rincones, menos abigarrados de cuerpos que las tradicionales opciones de Torremolinos, Fuengirola, Mijas, Estepona o Marbella.
Personalmente, fue una muy agradable sorpresa descubrir cuando Miryam y Javier nos sugirieron las calas al este de Málaga para realizar un reportaje fotográfico de post boda.
Casi llegando a la provincia de Granada nos dirigimos al Parque Natural de los Acantilados de Maro. Se trata de un tramo de costa acantilada entre las localidades de Nerja (Málaga) y la Herradura (Granada), a unos 45 minutos de coche saliendo de Málaga con dirección a Nerja – Motril.
Los perfiles rocosos dan a las playas un acceso difícil, con empinados caminos desde la zona de aparcamiento. Sin embargo, aunque nos agobie pensar que deberemos subirlos al regreso, merece la pena llegar a estas pequeñas calas entre paredes de piedra ya que nos proporciona un paisaje natural, salvaje que es sin duda lo que ibamos buscando.
Como anécdota la Cala de Maro aparece desde el primer hasta el último capítulo en la famosa serie de Verano azul con el nombre de “Cala Chica”. Ahora en este entorno se puede difrutar de recorridos en Kayak en rutas entre los acantilados de Nerja-Maro
Agradecer a los novios el fantástico rato que pasamos con ellos y el invitarnos a conocer nuevos rincones de la costa malagueñas con tanto encanto.